El gobierno iraní volvió a rechazar que ciudadanos de ese país estén involucrados en el ataque a la AMIA, en medio de las negociaciones con la Argentina, que tuvieron este martes una instancia clave en Ginebra en la búsqueda de un marco jurídico que permita enjuiciar a los acusados del hecho que causó 85 muertes.

Así lo indicó durante su encuentro semanal con la prensa el vocero de la cancillería iraní, Ramin Mehmanparast, quien a pesar de reiterar su rechazo a las acusaciones de la Justicia argentina contra ciudadanos iraníes -muchos de ellos ex funcionarios-, señaló que su país está "listo para identificar" a quienes hayan realizado el atentado.

"Condenamos el terrorismo, rechazamos cualquier acusación contra nuestros ciudadanos y declaramos que estamos listos para realizar una revisión detallada de quiénes fueron los que perpetraron este hecho", señaló Mehmanparast, según difundieron medios de prensa internacionales.

En este sentido, el vocero precisó que "las negociaciones" con la Argentina que se llevan a cabo en la sede de las Naciones Unidas en Ginebra, Suiza, "están en curso y continuarán hasta que se llegue a una conclusión clara".

Desde el gobierno argentino evitaron pronunciarse al respecto y sólo se limitaron a explicar que el hermetismo responde a que se tratan cuestiones “muy delicadas”.

En 2006, la Justicia libró órdenes de captura internacional contra ocho iraníes, entre ellos Ahmad Vahidi, actual ministro de Defensa; Moshen Rabbani, ex agregado cultural de la embajada de Irán en Buenos Aires; y Hadi Soleimanpour, entonces embajador y hoy viceministro de Relaciones Exteriores para Asuntos Africanos.