En febrero, los salarios formales en Argentina experimentaron su cuarto mes consecutivo de retroceso frente a la inflación, acumulando una caída del 23,9% desde noviembre, y ya se acercan al mínimo histórico del final de la convertibilidad. Según la Remuneración Imponible de Trabajadores Estables (RIPTE), los salarios aumentaron un 11,5% en el segundo mes del año, mientras que la inflación alcanzó el 13,2%, según el Índice de Precios al Consumidor del INDEC.