El Gobierno de Argentina informó “que el proyecto lanzado en 2008 para la construcción de un ferrocarril de alta velocidad se quedó sin financiación internacional por culpa de la crisis global”.

“Esta convulsión que vive el mundo hace que ese crédito que solamente era adjudicado a los efectos de un proyecto de estas características no exista más", dijo el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández.

La obra iba a demandar una inversión de 2.400 millones de euros que iba a ser financiada por el banco francés Natixis.