Este lunes se produjo una amenaza de bomba en la sede de la AMIA, lo que desencadenó un despliegue de seguridad en los alrededores del edificio. Esta situación representa el primer caso luego de que Argentina incrementara sus protocolos de seguridad ante posibles ataques terroristas. 

El alerta fue recibido a través de una llamada telefónica minutos antes de las 14:20, lo que llevó al corte del tránsito en la calle Pasteur al 600, donde se encuentra ubicada la institución. La Policía Federal se encuentra a cargo del operativo, en colaboración con la Policía de la Ciudad y los Bomberos. 

Las inspecciones tanto dentro como fuera del edificio no han arrojado resultados positivos, consignó por Continental nuestro periodista Fabián del Monte, quien se acercó hasta la sede. Esta tarde, la Policía de la Ciudad llevó a cabo cortes preventivos en la zona y se evacuaron edificios cercanos. 

A mediados de abril, tras los conflictos entre Israel e Irán, el Ministerio de Seguridad había intensificado los controles en sitios considerados sensibles, como la AMIA. Esta amenaza de bomba se produce horas después de que el grupo terrorista palestino Hamás aceptara un "alto el fuego" en el conflicto con Israel. 

La mutual emitió un comunicado confirmando la amenaza y la activación del protocolo de seguridad en conjunto con la DAIA y el DAC, involucrando al Departamento Unidad de Investigación Antiterrorista de la Policía Federal Argentina.