Sebastian Vettel, uno de los máximos referentes de la parrilla de la F1, no para de sumar temas que lo separan de la FIA. Permanentemente, agita cuestiones ecológicas que erizan a los directivos del automovilismo, por definición el deporte más contaminador. Este fin de semana recibió una sanción de 25 mil euros ‘en suspenso’ por abandonar la reunión con los comisarios de carrera, ofuscado por las incoherencias de los directores de Carrera en 2022 y la falta de respuestas a las consultas de los pilotos.