Cada pocos años, el Gran Circo debate sobre la imposición de un techo salarial para los pilotos como uno de los supuestos remedios al desborde presupuestario que vive la F1 desde los 90, cuando la gobernanza de la categoría se sintetizaba en la frase de Ecclestone 'more expensive, better' (cuanto más caro, mejor). Es un falso debate, porque el análisis de los presupuestos de los equipos indica que se gasta casi todo en I&D.