La FIFA ha anunciado este lunes la suspensión de tres años para el expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, por un beso no consentido que le dio a la jugadora Jennifer Hermoso durante la ceremonia de premiación del Mundial Femenino de Australia y Nueva Zelanda. La Comisión Disciplinaria de la FIFA determinó que Rubiales quedará inhabilitado para ejercer cualquier cargo o actividad relacionada con el fútbol durante este período.

La sanción se basa en el artículo 13 del Código de Conducta de la FIFA, que establece normas de conducta cívica y prohíbe adoptar una conducta que desprestigie al fútbol y a la FIFA. Además del beso no consentido, las autoridades disciplinarias también tuvieron en cuenta los gestos obscenos realizados por Rubiales en el palco de autoridades y las presiones que recibió Hermoso por parte de la RFEF.

Cabe destacar que Rubiales renunció a su cargo en la RFEF y a la vicepresidencia de la UEFA el pasado 10 de septiembre. Ahora tiene la posibilidad de presentar un recurso ante el Comité de Apelación de la FIFA.

Esta suspensión se suma a una inhabilitación provisoria de tres meses por la cual la FIFA le prohibió a Rubiales y a la federación contactar a Jennifer Hermoso y a su entorno cercano para evitar presiones y coacciones. Además, el expresidente de la RFEF está imputado por agresión sexual en una causa abierta en la Audiencia Nacional de España.

Es importante destacar que esta decisión de la FIFA demuestra su compromiso con la lucha contra el acoso y la violencia de género en el fútbol, y envía un claro mensaje de que este tipo de comportamientos no serán tolerados en el deporte.