Tras la extraña aclaración de la FIA la semana pasada (de coté en un comunicado de la Comisión del Motor) de que la marca alemana Porsche no había descartado su ingreso a la F1 en 2026 tras la caída de la negociación con Red Bull, ahora se sabe que el motorista en ciernes acerca posiciones con Williams para lograr lo que Red Bull no quiso: quedarse con la mayoría del paquete accionario del equipo al que ingresen y, por lo tanto, con la dirección estratégica del combo.