El gobierno nacional elevó al 35% los aranceles de importaciones para un centenar de productos, entre los que figuran celulares, tablets, computadoras, motos, bolígrafos, y bijoutería de metal común.

La medida apareció publicada el miércoles en el Boletín Oficial y obedece a un permiso acordado con los países del Mercosur en diciembre del 2011, en una cumbre de Jefes de Estado en Montevideo donde Argentina y Brasil decidieron incrementar los niveles de protección a sus industrias.

El decreto 25 de este año, es firmado por el vicepresidente Amado Boudou, y sus efectos legales comenzarán a regir a partir de este jueves.

La normativa presenta una variada gama de productos de diferentes sectores, inclusive del primario y la alimentación, como es el caso de los kiwis, la fruta de origen australiano, que comenzará a tributar 35 por ciento.

Entre las posiciones arancelarias presentas por Argentina al Mercosur que ahora gozarán del máximo de protección autorizada por la Organización Mundial del Comercio (OMC) figuran, además de los kiwis, café tostado sin descafeinar, semillas forrajeras, grasas y aceites y vegetales.

Otros productos del capítulos alimenticio incorporados son margarina, atunes y sus conservas, jugos de tomate, hongos, piñas tropicales y whisky en botellas de menos de 2 litros.

El decreto establece 35 por ciento de arancel, además, para la importación de alimentos para animales, tabaco, cremas de belleza y nutritivas y lociones tónicas.

El decreto incorpora partes de calzados, cerámicos, bijoutería de metal común y motocicletas que entre 250 y 800 centímetros cúbicos de cilindrada.

Además se incluyen juguetes, cepillos y escobas, encendedores de bolsillo, calentadores de agua y secadores de cabello, cafeteras y cassettes de cinta para grabaciones analógicas, entre otros productos.

La decisión de subir los aranceles a un centenar de posiciones arancelarias de Argentina y Brasil fue a consulta de Uruguay y Paraguay, que tuvieron que dar el visto bueno para evitar que se incluyeran artículos producidos intrazona.

La Organización Mundial del Comercio (OMC) permite a los países miembros un máximo de aranceles de importación para los productos industriales del 35 por ciento, mientras que establece medidas mucho más flexibles en el caso de los agrícolas.

La decisión adoptada por el gobierno argentino se suma a las restricciones burocráticas aplicadas desde la Secretaria de Comercio Interior y la Administración Federal de Ingresos Públicos.