Las últimas críticas de Cristina Kirchner al sindicalismo dejaron más cerca que nunca una cuestión que hasta hace poco era impensada: la posibilidad de que las tres patas de la CGT vuelven a juntarse en una sola central. En sus primeras palabras tras el discurso presidencial, Hugo Moyano salió a solidarizarse con el metalúrgico Antonio Caló y lo invitó a sumarse a la central única que intenta consolidar junto a Luis Barrionuevo.

"Lo más patético es la forma en que la Presidente se dirigió a los empresarios y a los sindicalistas amigos. Justamente con la presencia del secretario de la CGT oficialista. Yo creo que esto desde el punto de vista humano es inaceptable", advirtió el titular de la central sindical opositora.

El líder camionero consideró que la cadena nacional fue "un mensaje para todos" los sectores del sindicalismo para intentar "frenar lo que ya es imposible: que los gremios reclamen de acuerdo a la inflación que ha habido". "Si no, no se justifica la forma en que lo ha tratado a Caló.