Héctor Vaccaro, director de Mantenimiento y Talleres de AySA, murió este fin de semana en Lobos al no abrirse el paracaídas con el que se acababa de arrojar de una avioneta, en medio de un esparcimiento turístico durante el fin de semana largo. 

El mecanismo no se abrió correctamente, y el funcionario, de 61 años y que trabajaba en Aysa desde hacía casi dos décadas, se precipitó a tierra. Todo ocurrió este domingo, pasado el mediodía en el Aero Club Fortín de Lobos, durante una jornada del Club Escuela de Paracaidismo Lobos. 

La Justicia abrió una causa por "averiguación de causales de muerte", en la que intervienen la ayudante fiscal Gisela Dupraz y la Policía Científica. El cuerpo fue enviado a La Plata, donde se le verificará una autopsia. 

Vaccaro practicaba habitualmente deportes como navegación, buceo y paracaidismo.