La Cámara Federal porteña ha ordenado el secuestro de los teléfonos celulares que el diputado nacional Gerardo Milman no entregó a la Justicia en el marco de la causa en la que se investiga el intento de asesinato de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner ocurrido el 1 de septiembre del año pasado.

La jueza federal María Eugenia Capuchetti deberá solicitar la autorización de la Cámara de Diputados para avanzar con la medida, según lo establecido por la Ley de Fueros. La solicitud de secuestro de los teléfonos fue realizada por la fiscalía y por los abogados de la querella, luego de detectar que Milman había entregado a la Justicia un teléfono celular iPhone 14 Pro Max que fue lanzado al mercado después de la fecha del atentado.

La Gendarmería Nacional informó a la jueza Capuchetti que no cuenta con la tecnología suficiente para extraer información de ese teléfono, por lo que la magistrada consultó a la defensa de Milman si el diputado está dispuesto a proporcionar el patrón de desbloqueo.

En el fallo emitido este miércoles, los camaristas Leopoldo Bruglia y Pablo Bertuzzi autorizaron el allanamiento y secuestro de los otros teléfonos celulares que podrían estar en posesión del diputado nacional de Juntos por el Cambio. Esto se debe a que se ha detectado, a través de informes de empresas de telefonía, que Milman habría utilizado otros dispositivos durante el lapso temporal de interés para la investigación.

El juez Bruglia mencionó que, si bien los cambios de celulares suelen implicar la transferencia de datos del teléfono anterior, no se puede descartar la posibilidad de obtener información borrada o modificada en el teléfono original. Por su parte, el juez Bertuzzi destacó la gravedad del hecho objeto de la investigación y consideró que no se deben restringir las diligencias que puedan avanzar en la pesquisa.

En resoluciones anteriores, el juez Mariano Llorens había negado el secuestro del celular del diputado Milman, y en esta ocasión no encontró pruebas nuevas que cambiaran su posición. Sin embargo, señaló la actitud del diputado al presentarse en el juzgado y entregar un celular adquirido después de la fecha del hecho investigado, lo cual podría constituir un riesgo procesal.

La denominada "pista Milman" surgió cuando un asesor del Frente de Todos en la Cámara de Diputados afirmó haber escuchado al legislador opositor referirse al atentado antes de que ocurriera. La declaración de una asesora de Milman, quien afirmó que fue convocada para eliminar información de su teléfono celular, fue lo que llevó a la orden de secuestro del teléfono del diputado.

En conclusión, la Cámara Federal porteña ha ordenado el secuestro de los teléfonos celulares que el diputado Gerardo Milman no entregó a la Justicia en el marco de la investigación del intento de asesinato de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner. La medida fue solicitada debido a la sospecha de que Milman ha utilizado otros celulares durante el período de interés para la investigación.