El presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, le envió una nota al titular de la Auditoria General de la Nación (AGN), Leandro Despouy, intimándolo a que en el plazo de 24 horas "disponga la efectividad de los nombramientos" votados por la Cámara baja hace una semana, bajo la advertencia de iniciar acciones penales y patrimoniales. El presidente de Diputados le aclara al titular de la AGN (organismo dependiente del  Congreso Nacional) que "la fecha de cese de los auditores es el 5 de setiembre, de acuerdo a una resolución de 1996 emitida por la Comisión Mixta Revisora de Cuentas".

También le pide que "se disponga efectividad de los nombramientos legítimos y puesta en posesión de los cargos efectuados por la Cámara, correspondientes al Frente para la Victoria", es decir los de Julián Alvárez y Juan Ignacio Forlón. Le solicita, además, que informe "por qué se han suspendido reuniones convocadas por el presidente de la AGN", en lo que evalúa como "un intento por restringir el ejercicio pleno de sus funciones, en desmedro a su nombramiento y potestades".

"Esta Presidencia entiende que la inobservancia a lo que manda el Poder Legislativo configura gravedad institucional y alzamiento contra sus incumbencias constitucionales" y que "el presente requirimiento deberá ser cumplido o en el plazo de 24 horas desde su recepción, y en caso de incumplimiento o silencio se efectivizarán las responsabilidades penales y patrimoniales".

Por Continental, Despouy alegó que "Lo que aconteció fue que la reunión prevista para que asuman requiere un acto expreso de asunción, los auditores evaluamos en una reunión previa y decidimos suspender esa reunión y trasladarla al 25. Las razones por las cuales lo hicimos son múltiples: recibí requerimientos escritos de los auditores, hablando sobre la oportunidad (de los nombramientos) y por las, a su juicio, ilegales designaciones. Como se ha generado una situación de litigiosidad extrema, decidimos suspender la reunión", admitió en La Mirada Despierta.