Malvinas
El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, aseguró que la Argentina no sólo brega por la recuperación de la soberanía sobre las Islas Malvinas sino que también entiende que la zona debe ser “un ámbito de paz”. De esta forma, se refirió al rechazo expresado ayer por el gobierno argentino a maniobras militares realizadas en las islas por la fragata HMS Iron Duke, que participó de un ejercicio militar en la Bahía y el Brazo de San Carlos, que incluyó el disparo de 136 proyectiles. 

“Entendemos que expresan un grado de militarización creciente”, afirmó el jefe de ministros, algo que la Argentina viene denunciando ante foros internacionales, al tiempo que insiste en reclamar que Gran Bretaña cumpla con las resoluciones de las Naciones Unidas que instan a entablar un diálogo en torno a la soberanía. 

   13N
En otro orden, subrayó que el Gobierno "es respetuoso de la libertad de expresión" al referirse a la protesta contra la administración kirchnerista convocada ayer desde las redes sociales, denominada 13N y que reunió a escasos manifestantes, y la definió como "una expresión intensa de grupos minúsculos que es muy bueno que se manifiesten". Además, contrastó su posición con la de los "grupos mediáticos concentrados" que, dijo, "no quieren que exista libertad de expresión y quieren capacidad de imposición de un mensaje de carácter unidireccional".

En ese contexto, el jefe de Gabinete cuestionó a los medios opositores por "no tener ética periodística" y por recurrir a "maniobras y artilugios" para "no pagar impuestos y no cumplir con la ley". Aludió así en primer lugar al diario La Nación que mantiene una deuda impositiva con la AFIP y también al diario Clarín por sus reiteradas apelaciones judiciales que impidieron la vigencia de la ley de servicios de comunicación audiovisual por más de cuatro años hasta que fue convalidada por la Corte Suprema de Justicia. 

   Fondos buitres
Asimismo, enfatizó que "no hubo hasta el momento una notificación oficial" por parte del mediador Daniel Pollack para negociar con los holdouts en enero de 2015. "Argentina se puso al frente para luchar contra esas bandas delictivas y muchos economistas y dirigentes políticos uno los ve desesperados para tratar de arreglar con estas bandas delictivas”, afirmó ante versiones de que ese encuentro se realizaría entre el 5 y el 9 de enero. Sostuvo que la mayoría de los economistas del establishment sostienen que “hay que arreglar rápido con los holdouts y pagarle lo que ellos quieren, dejarse extorsionar y romper los principios esenciales de soberanía y equidad de trato, con tal de beneficiar a estos grupos de intereses al sistemas financiero, o estas bandas delictivas que son los buitres a nivel internacional”.