Por Continental, Miguel Bonasso hizo un pedido de informe sobre el avión militar de los Estados Unidos al que se le detectó un tercio de carga no declarada.

El diputado de Diálogo por Buenos Aires argumentó que, a juzgar por la información publicada, “se estarían violando varias leyes, como por ejemplo la norma que establece que el ingreso de tropas extranjeras sólo se puede realizar con la autorización del Congreso”.

“Es un episodio oscuro. Hay que rescatar la tarea de la gente de la Aduana y de la Policía Aeronáutica, que han procedido bien”, destacó, y vituperó “algunos pedidos muy arrogantes por parte de funcionarios de Estados Unidos”.

“También hay una responsabilidad muy negativa del Gobierno argentino que tendrán que explicar, si hay un convenio o no”, alegó en La Mañana.

En otro orden, informó sobre la presentación de la fuerza política Alternativa Verde, junto a “un grupo de compañeros de distintas organizaciones ambientalistas que me apoyaron mucho en la Ley de bosques y, sobre todo, en esta durísima Ley de Glaciares” que, en su primera versión, fue vetada por la presidenta y que, tras la elaboración de un proyecto consensuado con el senador oficialista Daniel Filmus, fue aprobada, pero sigue sin reglamentarse.

“Estos compañeros creen que, dada mi referencia, puedo tender a aglutinar a todo un sector juvenil de militantes ambientalistas, en un momento en que se ve que en el país no existe una política ambiental. Los problemas, en cambio, crecen”, adujo.

Entre ellos “está la gente de ‘Diálogo por el Ambiente’, de la ‘Fundación de Cambio Climático’, y otros, que se reúnen hoy y están tratando de conseguir adhesiones”, explicó.

Para Bonasso, lo que está ocurriendo con la Ley de Glaciares “es inquietante. Se reitera lo que pasó con la Ley de Bosques, pero con un agravante: que el secretario de Medio Ambiente ha dicho que la demora tiene que ver con que la ley tiene problemas judiciales”, se indignó.