El cardenal Jorge Bergoglio encabezó este viernes una misa para los familiares de las víctimas de la tragedia de Once, en la que denunció que “hay responsables irresponsables que no cumplieron con su deber”.

“Casi la totalidad de ellos venía a ganarse el pan dignamente. No nos acostumbremos, Padre, que para ganarse el pan dignamente hay que viajar como ganado. No nos acostumbremos a que en esta ciudad no se llora nada; todo se arregla y todo se paga”, aseguró Bergoglio durante su homilía en la Catedral Metropolitana.

“No queremos pegarles, pero sí corregir su corazón porque su irresponsabilidad cuesta caro, porque no hay precio que pague una vida sesgada”, aseguró en su oficio.

El primado argentino exhortó también a los familiares de las víctimas mortales y los heridos a “un reclamo sereno de justicia”.

El arzobispo porteño reconoció que “ningún cura, cardenal o Papa” puede explicar el dolor humano y la muerte, ni dar una respuesta “tranquilizadora a los familiares y pidió no acostumbrarse a desinteresarse por el sufrimiento del otro. “No nos acostumbremos a la mano fácil que sacude y dice ‘gracias, a mí no me tocó’. Somos hermanos en el dolor y como hermanos miramos el cielo y nos preguntamos por qué”, agregó.

Familiares de los muertos en el accidente ocuparon los primeros asientos del templo porteño exhibiendo pancartas con imágenes de los fallecidos y un único reclamo: “Justicia”.