El jefe de Gabinete y candidato a gobernador bonaerense, Aníbal Fernández, sostuvo que el fallo de la cámara que anuló las elecciones en Tucumán “forma parte de una conspiración, una aberración, un insulto y un agravio al que han sometido al pueblo tucumano”. Fernández confirmó que mantuvo ayer una conversación telefónica con el gobernador José Alperovich y otra personalmente con el candidato triunfante, Juan Manzur, con el propósito de analizar los pasos a seguir con “respecto a este desaguisado” y a “las burradas que sostiene el contencioso”.

Añadió que ese escrito expresa que la Junta Electoral "permite hechos irregulares a los electores ignorantes que tienen que ser cuidados por los electores inteligentes y si no hay un ejemplo del voto calificado y de desprecio por el otro, muy difícil que suceda una cosa tan grosera como la que se ve”. 

Subrayó que estos sectores “tienen una ausencia de valores y seguimos enterrando al pobrerío y quien está en condiciones de vulnerabilidad” y agregó que “la conspiración tiene que ver con esa ausencia de valores que en definitiva tendría que ser tutelado por el sector inteligente” y que “los sectores de escasos recursos son la mayoría y los acomodados, las minorías”, por lo que se interpreta que “los pobres no deberían votar según el contencioso, porque no tienen valores”.

Sobre lo que sostiene la oposición de que la Corte Suprema tucumana responde al gobernador Alperovich, el funcionario nacional señaló que “estamos discutiendo una demanda contra el Estado, no contra una persona determinada y el Estado no tiene parientes”, y acotó que "Manzur fue elegido por la voluntad popular” y “dos señores que integran el Tribunal Contencioso eligieron el derecho por una casualidad y con una profunda vocación de desprecio por los hombres y mujeres vulnerables, a los que han agraviado y destrozándolos de la mejor forma”.