El equipo de cirugía del sanatorio privado San Lucas, de San Isidro, separó a dos niñas siamesas que estaban unidas por el abdomen, algo que no se producía en el país desde 1999, destacó por Continental el doctor Jorge Buraschi, jefe de Cirugía Pediátrica del nosocomio.

En Magdalena Tempranísimo, consignó que “Francesca y Martina se recuperan aceleradamente. Ya están sin asistencia respiratoria y alimentándose por la boca. Se espera que dentro de pocos días sean dadas de alta”, añadió.

La cirugía de separación de siamesas es considerada un verdadero desafío. Fue necesario un equipo de casi veinte profesionales, destacó. “Tuvimos que seccionar el hígado, parte del esternón y costillas, reconstruir la pared abdominal y torácica, y realizar la reconstrucción plástica de la herida. La cirugía duró seis horas”, describió.

“Los bebes siameses proceden del mismo óvulo fecundado y comparten la misma placenta. Son siempre del mismo sexo y genéticamente idénticos”, explicó Buraschi. El nacimiento de siameses es extremadamente infrecuente. Se calcula que ocurre una vez cada 200.000 nacimientos. Las cirugías para separarlos son siempre riesgosas y su éxito depende de qué órganos o tejidos estén unidos, concluyó el facultativo.