El liberiano que viajó a Estados Unidos y que luego fue diagnosticado con Ébola mintió conscientemente "bajo juramento" sobre el contacto que había tenido con personas enfermas, por lo que Liberia quiere llevarlo a juicio, informaron hoy medios locales.

Thomas Eric Duncan, el primer paciente diagnosticado con Ébola en Estados Unidos, se encuentra hospitalizado desde el pasado 28 de septiembre en Dallas tras llegar días antes en un vuelo procedente de Liberia.

Diversas autoridades liberianas insistieron en que deberá ser juzgado a su regreso al país por "mentir bajo juramento" sobre su contacto con el Ébola en los controles de salida del aeropuerto en Liberia.

El viceministro del Ministerio de Información liberiano, Isaac W. Jackson, citado por el diario Liberian Observer, afirmó que cuando Duncan fue interrogado sobre si había tenido contacto en los últimos 21 días con enfermos de Ébola respondió que "no".

"Por esta razón, debe ser procesado", insistió Jackson, quien añadió que Duncan también deberá ser llevado ante los tribunales por "conducta negligente" y poner en riesgo la salud de otros "siendo plenamente consciente".

El director de las Autoridades Aeroportuarias de Liberia, Binyah Kesselly, también señaló que Duncan "será procesado" cuando vuelva a Liberia.

Al igual que el Ministerio de Información, Kesselly insistió que Duncan "mintió" en el cuestionario de salida del aeropuerto al ocultar su contacto con el Ébola y permitiendo así su llegada a territorio estadounidense.

Duncan consiguió burlar el dispositivo de seguridad que el Gobierno de Liberia ha organizado ante la amenaza de la propagación del Ébola, que incluye un cuestionario a los pasajeros de los vuelos que entran o salen del país, además de un escáner para detectar la fiebre.

La presidenta de Liberia, Ellen Johnson Sirleaf, aseguró en una entrevista con la emisora canadiense CBC estar "muy enojada" por el comportamiento del hombre y que ordenará estudiar la posibilidad de llevarlo a juicio por el hecho de haber mentido en formularios oficiales.

La mandataria dijo sentirse muy apenada porque Estados Unidos ha enviado ayuda a Liberia y ahora se ve afectado por la enfermedad por un liberiano.

Cinco días antes de su vuelo, que partió el 19 de septiembre, había estado ayudando a una mujer embarazada con Ébola en la búsqueda de un hospital. La mujer murió poco después. El liberiano llegó el 20 de septiembre a Texas y pocos días después se le diagnosticó el virus. Desde entonces está en aislamiento en el Hospital Presbiteriano y su estado es grave.

El jueves se supo que el paciente diagnosticado con Ébola habría tenido contacto con hasta 100 personas antes de ser aislado y hospitalizado. "Como medida de precaución los expertos en salud pública están investigando unos 100 contactos potenciales o posibles con el paciente", indicó el Departamento de Salud Estatal de Texas en un comunicado.

Este brote de Ébola, el más grave desde que se descubrió la enfermedad, surgió en Guinea Conakry el pasado marzo y se extendió posteriormente a Liberia, Sierra Leona, Nigeria y Senegal.

Desde entonces, el virus ha causado ya la muerte de 3100 personas, la mayoría en Sierra Leona, Liberia y Guinea Conakry.

Estados Unidos repatriará hoy a un camarógrafo que contrajo Ébola en Liberia, el cuarto estadounidense que contrae el virus en ese país, después de que tres misioneros cristianos fueran infectados en centros médicos.

El camarógrafo freelance, que trabajaba para NBC News, descubrió que tenía fiebre el miércoles, indicó su canal de televisión, y está en cuarentena en un centro de tratamiento de Médicos sin Fronteras (MSF).

Aunque el nombre del camarógrafo no fue revelado, NBC indicó que "ha estado trabajando en Liberia en varios proyectos durante los tres últimos años".