La nueva investigación busca determinar si Sarkozy, quien fue procesado por la Justicia la semana pasada, dejó que la UMP, inmersa en deudas y problemas económicos que podrí­an llevarla a la desaparición, pagara la multa que recibió el ex Jefe de Estado por superar el limite de los gastos de campaña presidencial de 2012.

Por no respetar el limite de dinero estipulado por ley, que el Estado devuelve luego a los partidos que superan el 5% de los votos, Sarkozy fue multado con 153.000 euros y privó a la UMP, el principal partido opositor, del reembolso de los gastos de campaña, lo que la dejó a un paso de la quiebra.

A pesar de la delicada situación económica de la UMP, Sarkozy, que organizó una colecta para recuperar el dinero invertido en la campaña, solicitó a su partido que pague su multa, algo denunciado desde dentro de la UMP a la Justicia, que rápidamente abrió una investigación.

"Es un escándalo. Denuncio formalmente la instrumentalización de la justicia. Abatir a Nicolas Sarkozy y su entorno se transformó en una obsesión de Estado", disparó hoy el ex ministro de Interior Claude Guéant, también procesado por la Justicia en otra causa en la que figura el nombre de ex presidente, en la radio Europe 1.

Presidente de Francia entre 2007 y 2012, Sarkozy (junto a su abogado y dos magistrados) fue procesado hace una semana por "corrupción" y "tráfico de influencias" debido a sospechas de que contaba con una "red de informantes" en la Justicia y la policí­a, que le revelaba detalles de la media docena de investigaciones judiciales que lo conciernen.

Por su parte, el ex mandatario rompió un silencio de más de dos años con una entrevista televisiva para denunciar una "instrumentalización de la justicia" y "acusaciones grotescas" en su contra.

La presión de la Justicia sobre el polí­tico conservador podrí­a hacer que decida retornar a la política, tras su derrota en las elecciones presidenciales de 2012 por el socialista Hollande, más rápido de lo que tenía pensado.

Además de la causa por la que fue procesado, la Justicia francesa mantiene abiertas otras cinco investigaciones donde figura el nombre de Sarkozy, entre ellas una por presunto financiamiento de su campaña electoral de 2007 con dinero donado por el ex lí­der libio Muammar Kaddafi.

Sarkozy ya habí­a sido procesado el año pasado en el `caso Bettencourt`, acusado de abusar de la senilidad de la millonaria Liliane Bettencourt, dueña de L`Oréal, para obtener de ella dinero para su campaña, pero pocas semanas después la causa no prosperó y el polí­tico fue absuelto.