El gobierno de Francia anunció el envío de 1.000 soldados a la República Centroafricana como parte de una esperada misión de la ONU para contener el creciente caos en ese país.

Los rebeldes han sido acusados de cometer extendidos abusos, incluyendo asesinatos, violaciones y reclutamiento de niños soldados.

La semana pasada, el canciller francés, Laurent Fabius, dijo que la ex colonia francesa estaba "al borde del genocidio".

El envío de los soldados marcará el segundo incremento de la presencia militar de Francia en África en lo que va del año, luego de una campaña lanzada en Mali en enero pasado contra insurgentes vinculados a Al Qaeda que habían tomado el norte de ese país.

Francia todavía tiene 2.800 soldados en Mali, otra de sus ex colonias.

En declaraciones a la emisora France Culture, el ministro Fabius señaló hoy que el envío de los nuevos soldados se hará en cuanto se apruebe una resolución en el Consejo de Seguridad de la ONU y el gobierno centroafricano haga la petición formal.

Francia cuenta en la actualidad con 410 efectivos en el país, cuyo primer ministro, Nicolas Tiangaye, se reunió ayer con Fabius.

El jefe de la diplomacia de Francia agregó a France Culture que las fuerzas francesas tendrían como primer objetivo restablecer la seguridad en el país, que está "al borde de la implosión" por la "exacerbación de las oposiciones religiosas".

El ministro indicó que los rebeldes son de mayoría musulmana, frente a una población esencialmente católica, por lo que consideró que "hay un riesgo de que el conflicto se transforme en una oposición religiosa", informó la agencia de noticias EFE.

Según el calendario desvelado por Fabius, Francia prevé que la semana próxima se vote la resolución en la sede de la ONU en Nueva York y el despliegue tendría lugar a mediados del mes próximo.

Además de restablecer la seguridad, París apuesta por prestar ayuda humanitaria a una población que atraviesa "una situación abominable", preparar la transición política y contribuir al desarrollo económico, señaló Fabius.

El ministro de Defensa, Jean-Yves Le Drian, por su parte, aseguró en la radio Europe 1 que el contingente francés serviría para "acompañar a la fuerza africana que se está preparando en estos momentos" para intervenir en la República Centroafricana.

Agregó que la operación no tendrá nada que ver con la de Mali, será "una intervención breve para restablecer la seguridad, de unos seis meses".

La República Centroafricana "está colapsando, y no podemos tener un país que se esté desintegrando. Hay la violencia, las masacres y el caos humanitario que sigue al colapso", agregó el titular de Defensa.