"Se hallaron granadas, munición y un artefacto explosivo listo para ser usado, cargado de munición y con una potencia equivalente a dos kilogramos de trilita", informó el Comité Nacional Antiterrorista (CNA) ruso tras la operación realizada en la madrugada.

El CNA declaró el régimen de operación antiterrorista en determinadas zonas de la capital de la provincia de Kabardino-Balkaria, y luego detuvo a cinco sospechosos de pertenecer a "una banda terrorista internacional".

"No hay víctimas entre la población civil ni tampoco entre los agentes de las fuerzas de seguridad", precisaron las autoridades.

A cuatro semanas de que empiecen los Juegos Olímpicos de Invierno en Sochi, Rusia se volcó de lleno a reforzar la seguridad del evento, sobre todo después de que dos atentados suicidas sacudieran en menos de 24 horas y a dos días de la Nochevieja la ciudad rusa de Volgogrado, también en el sur del país.

Un atentado suicida en la estación de tren de Volgogrado, seguido de otro en un trolebús del transporte municipal de la misma ciudad, se cobró la vida de 34 personas.

Decenas de heridos en los dos atentados, perpetrados presuntamente por la guerrilla islamista del Cáucaso Norte, siguen hospitalizados tanto en Volgogrado como en Moscú, adonde trasladaron a la mayoría de los heridos más graves.

El presidente ruso, Vladimir Putin, prometió el pasado 1 de enero desde Volgogrado que las autoridades continuarán la lucha contra los terroristas hasta "su completa eliminación".