Los choferes de la línea 60 marchaban esta mañana a la Plaza de Mayo en el marco de la continuidad del conflicto por medio centenar de despidos. En el día 12 de las acciones gremiales que incluyen el no cobro de boleto a los pasajeros, los trabajadores marcharon a las 10 desde el Congreso Nacional hasta la sede del Ministerio del Interior y Transporte para pedir al Estado que "se responsabilice de la situación" ya que el grupo empresario DOTA continúa "recibiendo los subsidios" correspondientes. 

Por Continental, Néstor Marcolín, delegado de UTA en la Línea 60, reiteró que la empresa concesionaria, Monsa, persiste en un "lock out patronal, intentando que la línea 60 no salga a la calle", y planteó que la lucha gremial es "en defensa del transporte público".

Esta mañana, en tanto, entre las 7 y las 8 y en solidaridad con los trabajadores de la línea 60, empleados de la línea B de subterráneos liberaron las puertas de acceso de la estación Federico Lacroze, por lo que los usuarios que ingresaron por allí no pagaron el correspondiente boleto. Por esta acción, Metrovías ya anunció que presentará una denuncia ante la Subsecretaría de Trabajo.