El radical Mario Cimadevilla, miembro del Consejo de la Magistratura, expresó por Continental sus sospechas de que “en el Juzgado de Norberto Oyarbide hay una asociación ilícita”. En La Mirada Despierta, cuestionó “que se dilate el tratamiento de la investigación que se sigue sobre ese magistrado”, tal cual lo indica el reglamento de funcionamiento del cuerpo.

Para Cimadevilla, “Oyarbide no es un ejemplo de magistrado, es el paradigma de lo que no debe ser un juez. En este caso concreto, un allanamiento ordenado por él fue suspendido a raíz de un llamado de un funcionario del Ejecutivo, donde además detiene el allanamiento a sabiendas de que allí se estaba cometiendo un ilícito y él debió apersonarse en el lugar, convocar a la fuerza policial y detener a quien está cometiendo el ilícito”, argumentó.

En cuanto al descargo que debe realizar ante el Consejo de la Magistratura, el senador puntualizó: “El hecho que se le imputa lo reconoce públicamente señalando que lo llamó un hombre que le merece su más extrema confianza y que trabajaba junto a Carlos Zanini, así que no sé qué va a decir en el descargo”.

Ayer, el Consejo de la Magistratura resolvió notificar y ofrecer un descargo voluntario al juez federal Norberto Oyarbide, en tanto que citó a otro de sus pares más cuestionados, Claudio Bonadío, a raíz de denuncias en su contra por mal desempeño de sus funciones en la instrucción de las causas judiciales por la privatización de Tandanor y los créditos que le otorgó el Estado a la curtiembre Yoma durante los años 90.

La citación se aprobó luego de que se impusiera en la votación el pedido del bloque kirchnerista, integrado por los consejeros Eduardo Wado De Pedro, Julián Alvarez, Carlos Moreno, Ada Itúrrez y Manuel Urriza. Al voto de los representantes del oficialismo se adhirió el senador nacional de la UCR, Mario Cimadevilla.