En octubre se cumplen 30 años desde la aparición comercial de la primera pantalla táctil, a través de la computadora personal HP150. Ese modelo tuvo una corta vida de cinco años, cuando su producción se discontinuó, y hace un lustro revivió cuando una demanda más dispuesta y preparada adoptó las tabletas a su vida cotidiana.

Treinta años atrás el mercado conoció la HP150, una computadora personal con pantalla táctil, la primera MS-DOS de HP. Ese modelo marcó pocas ventas comparado con otros equipos de la misma época. Comenzó a ser conocida de manera masiva a partir de la película Real Genius o Escuela de Genios, de acuerdo al país de difusión en el año 1985.

Se trataba de una comedia estudiantil; en un supuesto campus de una universidad tecnológica, dónde genios adolescentes se enredan en cuestiones amorosas y en la construcción de armas; que recaudó 12.952.019 dólares en Estados Unidos y Canadá.

La HP150, con un procesador Intel 8088, tenía una pantalla de 9 pulgadas, contaba con el sistema de touch screen y su valor rondaba los 2.700 dólares. También fue famosa por ser centro del escenario del programa de televisión estadounidense Computer Chronicles, dirigido por Stewart Cheifet que se emitió por 20 años, desde 1983 a 2002.

El sitio neoneto.com recuerda que la pantalla táctil era una ingeniosa grilla de rayos de luz infrarroja, con emisores en dos de los lados de la pantalla y receptores en los lados opuestos, que permitía a los afortunados poseedores de la HP150 sustituir con un "toque" muchos comandos que exigían el ingreso de crípticas sentencias DOS mediante el teclado.

La generación posterior al sistema operativo DOS poco sabe sobre la necesidad de ordenar textuales a la computadora, (bajo las teclas "erase" para borrar un archivo, "copy" para copiarlo, o "print" para imprimirlo).

En la HP 150 cuando el dedo del usuario (o cualquier otro elemento opaco) interrumpía uno de los rayos de luz, el hardware registraba el evento y lo comunicaba al sistema operativo, que actuaba en consecuencia. Lo anterior generaba algunas incompatibilidades con el software, pero básicamente significaba que aquellos programas que no estaban preparados para el "toque mágico HP" tuviesen que usarse como en cualquier otro ordenador.

"Un inconveniente típico de estas pantallas era el polvo", publicó Neoneto.com, situación por la cual si el equipo se iba a usar en ambientes industriales, los agujeros que alojaban los LED IR acababan tapándose, y la pantalla táctil dejaba de funcionar hasta que se los limpiaba.

Para los nostálgicos vale recordar que esta computadora usaba discos duros con capacidades de entre 5 y 25 megabytes y las disqueteras de 3,5 pulgadas podría ser de una (270 kilobytes) o dos caras (540 kilobytes). La memoria RAM básica del equipo era de 256 kilobytes que era bastante para la época y de todos modos si se quitaba una de las tapas traseras se podría agregar un módulo de expansión que llevaba al HP150 hasta unos 640KB.

En julio de 1984, el HP150 pasó a llamarse simplemente "Touchscreen" y la empresa puso en venta un kit que incluía el CPU y una unidad de expansión con una disquetera y un disco duro al que bautizó "Touchscreen MAX". La hoja de cálculos (Multiplan, 495 dólares) ponía en pantalla una leyenda que indicaba "Para editar una celda, tóquela", y también aceptaba versiones de DOS de juegos como Ajedrez, TaTeTi, y el Zork 1.

Pese a las enormes ventajas de la pantalla táctil el touchscreen se discontinuó y tuvieron que pasar 25 años para que la industria encontrara que había una demanda receptiva para un producto de estas características (la tableta o el teléfono móvil) y una economía de escala que permitió su producción sin mayores riesgos.