Una mujer decidió desearle unas buenas noches a su marido a través del servicio Snapchat, pero lo que debían ser imágenes eróticas se convirtieron rápidamente en causal de divorcio, ya que el hombre obtuvo la prueba irrefutable de la infidelidad de su esposa.

La mujer, quien fue identificada sólo cómo Chelsea, posó en ropa interior desde un cuarto de hotel donde debía quedarse a pasar la noche. Sonriente y con la televisión prendida de fondo, la esposa se puso creativa con el timer de su celular y así produjo las imágenes, tal como se lo explicó a su marido cuando éste le recriminó que no estaba sola.

"Dejá de mentirme, Chelsea, no estás sola en ese cuarto de hotel", disparó el hombre. "Sí que lo estoy, amor, vos sabés que nunca te traicionaría", aseguró la mujer. Pero el marido explotó. "¿Entonces por qué se ven botas de hombre en tu segundo snapchat? No puedo pasar por esto de nuevo. Voy a llamar a un abogado", la apostrofó.