El pasado domingo, en la ciudad de Río Grande, una gendarme de 29 años perdió la vida a causa de un disparo en la cabeza en circunstancias aún no esclarecidas. La víctima fue identificada como María Rodríguez y, en el momento del hecho, se encontraban en el lugar tres compañeros de la fuerza, uno de ellos pareja de la fallecida, quienes fueron demorados por la Justicia para ser interrogados.

Según el relato de los tres imputados, todos estaban presentes en la vivienda cuando, en un momento dado, Rodríguez se dirigió al baño y, poco después, se escuchó un disparo. Al ingresar al baño, la encontraron herida en el suelo, aún con vida. La joven fue trasladada de urgencia al Hospital Regional de Río Grande, donde falleció horas después debido a la gravedad de la herida de bala en la cabeza.

La jueza de instrucción a cargo del caso ordenó la detención preventiva de los tres gendarmes presentes en el lugar, incluyendo a la pareja de la víctima. A pesar de que la hipótesis inicial apunta a un posible suicidio, los investigadores se encuentran analizando todas las pruebas recolectadas en la escena y no descartan ninguna línea de investigación. La jueza se involucró personalmente en la investigación y se espera que en las próximas horas se defina la mecánica de lo sucedido.

El caso ha generado conmoción en la ciudad y se espera que la Justicia esclarezca los hechos de manera exhaustiva, sin descartar ninguna posibilidad, a fin de determinar la verdad sobre la muerte de la gendarme María Rodríguez.