Los buzos de la Armada que inspeccionaron todos los compartimientos del San Jorge I, el buque hundido desde fines de febrero que permanece a 40 metros de profundidad en cercanías de Villa Gesell, determinaron que no hay ningún cuerpo en su interior. Hace pocos días se encontró el cadáver de uno de los tripulantes y aún hay otros cuatro marineros desaparecidos.
 
El Servicio de Salvamento de la Armada (SISA) a bordo del destructor ARA “Sarandí” efectivizó la exploración subacuática de los compartimentos del pesquero “San Jorge I” que restaban ser verificados, operación que fue realizada junto a los buzos de la Prefectura Naval Argentina.
 
A lo largo de los días, los buzos habían logrado ingresar a la embarcación explorando varios compartimentos de la parte superior del pesquero hundido, entre ellos los camarotes, baños, puente de comando, comedor y luego, mediante trabajos complejos, a la parte inferior como la sala de máquinas de la unidad.
 
En la última jornada de buceo, el personal del Servicio de Salvamento de la Armada logró ingresar a uno de los camarotes de la banda de babor que no había sido inspeccionado, luego de forzar una puerta de madera que obstruía el acceso al buque.
 
Los cuatro marineros que continúan desaparecidos son Pablo Vaccarezza, capitán de la embarcación, Alejandro González, Rogelio Hernández y Maximiliano Alí.
 
A fines de febrero, el buque San Jorge I dio una vuelta de campana a 41 millas náuticas de la costa, cerca de la localidad de Villa Gesell. Sólo tres personas pudieron ser rescatadas y se encuentran en buenas condiciones físicas. Se trata de Lucas Martínez, Carlos Iturrarte y Walter Barbas.
 
Días después el cuerpo del marinero Carlos Sebastián Peña fue encontrado por casualidad por otro barco pesquero que había tendido sus redes en cercanías de donde se produjo el hundimiento y su cuerpo quedó enredado.