El flujo de agua entre el Lago Argentino y su Brazo Rico -donde ayer el desnivel era de unos seis metros- bajo el puente de hielo de la pared norte del glaciar era hoy intenso y aumentaba la erosión y debilitamiento de sus paredes y techo.

El intendente de ese parque nacional, Carlos "Charly" Corvalán, dijo a Télam que el colapso de toneladas de hielo sobre las aguas "es inminente y lo esperamos para mañana".

Corvalán comentó que hoy hubo un ingreso mayor de turistas a Los Glaciares, pero que para mañana aguardan un acceso masivo, ya que "los hoteles de El Calafate están llenos de gente que vino para ver el rompimiento".

El intendente de esa comuna, Javier Belloni, habló con el titular de Aerolíneas Argentinas, Mariano Recalde, con la intención de sumar más vuelos a los seis que llegan diariamente a la ciudad si se ven desbordados por la demanda.

La villa turística, ubicada en la margen sur del lago Argentino, está a 50 kilómetros -por la ruta provincial 11- del acceso al parque nacional Los Glaciares y a 80 del Perito Moreno.

Un convenio entre la Cooperativa Telefónica de El Calafate y el parque permite seguir online por internet el proceso del rompimiento en el sitio www.cotecal.com.ar, que hoy mostraba a grupos de turistas que observaban el glaciar bajo la lluvia.

El extremo este del frente del Perito Moreno tocó a mediados de octubre último la Península de Magallanes, formando en el Canal de los Témpanos un dique entre el lago Argentino y su brazo Rico, y desde entonces la cota subió más de seis metros.

Los expertos explican que esa presión hace que el bloque de hielo se despegue del fondo del lago y comience a filtrar el agua, que horada hasta formar un túnel cada vez mayor, hasta que finalmente colapsa el puente que se forma sobre esa abertura y el lago equilibra su nivel.

Grandes desprendimientos del glaciar suceden antes y después de la gran ruptura, en el marco del estruendo que hace el hielo al fracturarse.

Un moderno sistema de amplias pasarelas, de casi cinco kilómetros y con varios balcones, facilita la observación desde diversos ángulos.

Corvalán dijo que el turista podrá disfrutar plenamente del espectáculo aunque la pasarela inferior estará cerrada "por si vuela un pedazo de hielo", en referencia a trozos de cientos de kilogramos que pueden impactar a centenares de metros.

También aclaró que el parque cerrará todas estas noches y no se permitirá la permanencia de turistas "de guardia" en espera del rompimiento, por cuestiones de seguridad vinculadas "a la emergencia hídrica y la extrema sequía" que afecta la zona.

El Moreno tuvo un ciclo de cierres en primavera y rupturas en verano cada cuatro años, pero desde febrero de 1988 pasaron 16 hasta el siguiente, en 2004, oportunidad en que el desnivel del agua fue de 27 metros e inundó grandes áreas contiguas Luego rompió en 2006, de noche, y la última vez fue el 9 de julio de 2008, durante el invierno, en ambos casos con desniveles de unos 10 metros entre el lago Argentino y el Brazo Rico.

Con sus 254 kilómetros cuadrados de superficie y 31 kilómetros de largo, el Moreno es famoso por el estremecedor espectáculo de su ruptura, pero no es el más grande: antes están el Viedma (977 km2, 70 km largo) y el Upsala (765 km2, 55 km de largo), otros de los principales atractivos del parque, que cuenta con más de 350 glaciares.