Acabar una noche de juerga manteniendo relaciones sexuales sobre el capó de un coche ajeno le ha acabado costando a una pareja de Baviera 2.700 euros en reparaciones más tres cuartas partes de los costes del juicio. Irrumpir en un garaje que no es el tuyo en lugar de acudir a tu casa le ha salido caro a los tortolitos, condenados por el tribunal de Weiden a pagar los desperfectos del vehículo.

La pareja salió de fiesta el 27 de diciembre por una cervecería de la región Alto Palatinado en el estado federado alemán de Baviera. Después del bar decidieron continuar con la fiesta invadiendo un garaje y divirtiéndose sobre el capó de un coche aparcado en él. A la mañana siguiente, la compañera del dueño del automóvil descubrió que la puerta del garaje estaba abollada y junto al coche encontró un condón usado, así como una chaqueta, un llavero y una diadema sobre el parabrisas.

El demandante presentó daños en el capó y en la matrícula. "Estos daños sólo se pueden explicar junto con las cosas encontradas en el garaje", declaró el experto Günter Loreth en el juicio.

El dueño del coche toca la tuba en un conocido grupo de carnaval de Franconia y no dudó en componer una canción sobre la curiosa historia que tituló como "El número del capó" y que será interpretada este sábado en las fiestas populares de la zona. De este modo, la pareja tendrá que hacer frente no sólo a los costos sino también a las burlas de sus vecinos.