El ministro de Asuntos Agrarios bonaerense, Gustavo Arrieta, informó este sábado que la mejora climática más las acciones realizadas en diferentes distritos permitieron descomprimir la situación hídrica en la provincia de Buenos Aires.

Un comunicado de prensa estimó que sobre las 3,5 millones de hectáreas inicialmente afectadas por las inundaciones, "menos de la mitad ameritan una atención especial por las características específicas".

Arrieta indicó que "es necesario esperar la evolución de las próximas horas para poder calcular definitivamente el impacto global" de las inundaciones en el espectro rural de la Provincia.

"Se espera la evolución de las próximas horas para calcular definitivamente el impacto global del fenómeno meteorológico y sus consecuencias sobre las extensiones productivas", remarcó.

El ministro señaló al "restablecimiento de tres cruces de caminos en el partido de Necochea merced a la implementación de puentes y dispositivos de emergencia", como parte de las acciones que realiza el gobierno frente las inundaciones producidas en territorio bonaerense.

De acuerdo con un relevamiento efectuado por la Dirección de Emergencia de la cartera agrícola, 3.519.201 de las 29 millones de hectáreas que abarca la provincia de Buenos Aires enfrentaron algún tipo de inconveniente a causa de las inundaciones y en la actualidad, menos de la mitad se encuentran en situaciones de "consideración especial".

El informe oficial señala que el área sembrada de trigo y cebada al 28 de agosto es de 3.028.030 hectáreas, de las cuales 412.590 se vieron afectadas por el fenómeno climático, lo que produjo una pérdida del 14 por ciento sobre el total del sembrado. También detalló que las precipitaciones ocurridas en agosto generaron importantes excesos de agua en el centro y sudeste de la Provincia con pérdidas sobre el stock ganadero y la producción apícola.