El oceanógrafo Walter dragani, sostuvo que "en caso de Tsumani para las embarcaciones es más peligroso estar cerca de la costa que en mar abierto, donde no se siente el efecto devastador del agua".

Resaltó que "el último que se sintió en las costas de América Latina fue el que afectó a Indonesia".
 
Por Continental destacó que "por el terremoto en Japón tal vez en la zona de Chile y Perú se sientan temblores pero muy leves".

En tanto el papa Benedicto XVI expresó su "profunda aflicción" por las "inesperadas y trágicas" consecuencias del devastador terremoto de 8,8 grados de magnitud en la escala de Richter y el posterior tsunami que azotaron hoy Japón.

En un telegrama en nombre del pontífice enviado a la Conferencia Episcopal japonesa, el secretario de Estado vaticano, Tarcisio Bertone, transmitió la "solidaridad" de Benedicto XVI con quienes trabajan en las tareas de socorro y apoyo a los afectados por la catástrofe.