Un equipo internacional de científicos ha hecho un importante descubrimiento en China, al encontrar nuevos fósiles de Dinocephalosaurus orientalis, un reptil acuático que vivió hace unos 240 millones de años durante el Triásico. Este fascinante animal, que medía aproximadamente cinco metros de largo, presentaba un cuello extraordinariamente largo con 32 vértebras separadas.

El Dinocephalosaurus orientalis es comparado con el Tanystropheus hydroides, otro reptil marino del Triásico Medio de Europa y China, debido a sus similitudes en la estructura del cráneo y la dentición especializada para la captura de peces. Sin embargo, el Dinocephalosaurus se destaca por tener un mayor número de vértebras en el cuello y el torso, lo que le otorgaba una apariencia más similar a la de una serpiente.

Este reptil estaba adaptado a la vida oceánica, como lo demuestran sus aletas y los restos de peces encontrados en su estómago. A pesar de las apariencias, el Dinocephalosaurus no estaba estrechamente relacionado con los famosos plesiosaurios de cuello largo que evolucionaron más tarde.

Los fósiles fueron hallados en la provincia de Guizhou, en el sur de China, y han permitido a los científicos tener una visión más completa de este asombroso animal de cuello largo. Este descubrimiento ha sido fruto de una colaboración entre investigadores de Escocia, Alemania, Estados Unidos y China, quienes han estudiado los fósiles durante una década en el Instituto de Paleontología y Paleoantropología de Vertebrados de Pekín.

La descripción detallada de este hallazgo ha sido publicada en la revista científica Earth and Environmental Science: Transactions of the Royal Society of Edinburgh.