Dos aviones corrieron riesgo de colisionar el domingo por la noche cerca del Aeropuerto de Ezeiza: uno ya había despegado y otro se preparaba para aterrizar. El episodio involucró a un aparato de la empresa LAN, que llegaba a Buenos Aires desde Miami, y a otro de United Airlines, que había despegado con rumbo a Nueva York.

“Pasaron a 120 metros uno del otro. El sistema de comunicación entre aviones dio la alarma y los pilotos resolvieron la situación”, señalaron fuentes militares. A nivel oficial no hubo ningún comunicado sobre el caso, ni de las empresas involucradas en el incidente, ni de la ANAC.

Por Continental, Patricia Arias, coordinadora nacional de ATE en el ANAC (Administración Nacional de Aviación Civil), explicó que este tipo de situaciones “pasan y pasaron siempre”, debido a “errores individuales, problemas de mantenimiento o problemas de tráfico”.

Sin embargo, enfatizó en Magdalena Tempranísimo, este tipo de situaciones no salía a la luz cuando el control de los vuelos estaba a cargo de la Fuerza Aérea. En este sentido, Arias denunció que, desde esa fuerza militar, los mismos casos que ocultaban cuando se producían bajo su control ahora son divulgados a la prensa por ellos mismos, “para recuperar el control de los vuelos”.

La presidenta Cristina Fernández le quitó el control aéreo a la Fuerza Aérea luego de varios hechos comprobados de controles irregulares en vuelos que, después se determinó, estaban relacionados con tráfico de drogas a otros países, como el famoso “narcojet” de tres hijos de coroneles de la Fuerza Aérea atrapado en Barcelona y cuyo juicio vuelve a la palestra periodística en estos días.