El padre Gonzalo, capellán del Hospital Moyano, describió por Continental el panorama dantesco que vio al acudir al Hospital Borda para solidarizarse con los médicos y pacientes reprimidos el viernes último por la Policía Metropolina.

"El Moyano y el Borda, más que nunca somos una sola cosa", destacó en La Mañana.

"Lo primero que encontré al llegar al hospital fue a un paciente golpeado. Era como una película surrealista en un lugar donde hay mucho dolor y sufrimiento", describió.

"En la mayoría de los casos, estos pacientes han sido abandonados por la familia y por el Estado", pero "la locura el viernes fue ver cómo les pegaban a ellos", añadió el sacerdote.