La NASA descubrió una bacteria que metaboliza el arsénico.

El hallazgo hecho en los sedimentos del lago Mono de California redefine la biología y ayuda en la búsqueda de vida extraterrestre.

“El descubrimiento demuestra que la vida que se abre camino a como dé lugar con lo que tiene a mano”, valoró por Continental María Eugenia Farías.

La investigadora del CONICET y jefa del Laboratorio de Investigaciones Microbiológicas de Lagunas Andinas insistió en que “no se encontró vida extraterrestre, como algunos medios publicaron, sino que se demostró que puede haber vida en condiciones diferentes a las de la Tierra”.

“Lo que se anunció ayer nos dejó con la boca abierta. Es una bacteria que reemplaza con arsénico el fósforo”, confesó en Magdalena Tempranísimo.

Y advirtió que “esto recién empieza”.