El empresario textil y dueño de la avioneta siniestrada en el Río de la Plata, Federico Bonomi, aseguró hoy que el piloto de la aeronave, uno de los fallecidos en el accidente, era "muy experimentado".

Sorprendido por la trágica noticia en Estados Unidos, donde se encuentra de vacaciones, el titular de la firma de ropa Kosiuko
aclaró que el piloto Leandro Larriera se capacitaba en América del Norte todos los años.

"Yo estoy en Estados Unidos y me enteré por los medios. Lo único que sé es que el piloto, Leandro Larriera, trabaja hace
catorce años conmigo y es muy experimentado", dijo Bonomi, en diálogo con medios televisivos.

Bonomi, quien en ese momento ignoraba que el piloto era una de las cinco víctimas fatales del accidente, dijo que quería "mucho" a Larriera y afirmó también que la aeronave era nueva y bimotor.

"Allí viajaba gente de mi entorno, uno de ellos es Sebastián Vivona", aseguró el empresario textil, quien confirmó que el
gerente de Kosiuko estaba vivo, pese a que autoridades uruguayas lo incluían en la nómina de fallecidos.

También viajaba otro de sus allegados a quien no identificó.  Además señaló que utiliza la aeronave ahora destruida para
viajar permanentemente con su familia y amigos porque tiene su campo en Carmelo, Uruguay.

También reiteró que la avioneta, una Beechcraft B200, es "de última generación, con un mantenimiento impecable" y señaló:
"Honestamente desconozco qué pudo haber pasado". 

La máquina había abandonado el aeropuerto de la localidad bonaerense de San Fernando y se dirigía a tierras uruguayas,
cuando cayó al agua por motivos que se desconocían.