El jugador de Huracán Lucas Villarruel, de 22 años, sufrió un secuestro exprés junto a su padre en Lomas del Mirador, partido de La Matanza. Además, les robaron su vehículo. Cuatro delincuentes armados los abordaron cuando se disponían a llevar la camioneta del futbolista a una cochera a tres cuadras de su casa, relató Luis Villarruel, padre del deportista.

El joven recibió “un fuerte golpe en la cabeza con la culata de un revólver. Nos amenazaban con las armas y pretendían llevarnos a recorrer cajeros, pero desistieron porque ni yo ni mi hijo llevábamos las billeteras encima”, explicó en Magdalena Tempranísimo.

El jugador recibió tres puntos de sutura debido al golpe, y consideró que la sacaron “regalada. Son cosas que pasan, hoy me tocó a mí”, manifestó el deportista, quien estimó que se trató de “un robo al voleo”.