El Tribunal en lo Criminal número 2 de la ciudad bonaerense de Mercedes dictará este martes sentencia en el juicio realizado a las hermanas Marina y Ailén Jara, acusadas del presunto intento de homicidio de un hombre que, según declararon las jóvenes, intentó violarlas.

Militantes de organizaciones sociales, políticas y defensoras de los derechos humanos anunciaron que se concentrarán, a las 9, en la puerta del edificio judicial de Mercedes para respaldar a las jóvenes, para quienes el fiscal Guillermo Altube pidió que sean condenadas a la pena de 5 años y 6 meses de prisión.

Por su parte, integrantes de la Campaña Nacional contra las Violencias hacia las Mujeres se movilizaron este lunes desde los Tribunales nacionales hacia la Casa de la Provincia de Buenos Aires, en Callao 237, para pedir la absolución de las jóvenes.

"En la sentencia que se dicte a las hermanas Jara se juega un mensaje sobre violencia de género para toda la sociedad", consideró Paula Cruz, integrante de la organización.

La defensa de las acusadas, encabezada por los abogados Gabriela Conte y Eduardo Suárez, reclamó la absolución de ambas porque actuaron, dijo, en legítima defensa debido a que habían sido víctimas de un hecho de violencia.

La decisión final quedará en manos de los jueces integrantes del Tribunal Marco Barski, Graciela Larroque y José Ibrahim, que darán su veredicto este martes.

Durante el proceso judicial, las acusadas, que tienen 20 y 21 años, estuvieron acompañadas por diferentes organizaciones sociales y legisladores, entre ellas las diputadas Victoria Donda (FAP) y María Luisa Storani (UCR), que exigieron la liberación de ambas.

"Redoblamos nuestra solidaridad con las hermanas Jara, y esperamos con toda convicción que termine esta pesadilla, que recuperen prontamente su libertad", expresó la legisladora porteña María Elena Naddeo, del bloque Frente Progresista y Popular.

Las hermanas Jara están detenidas desde febrero de 2011 en el penal de Los Hornos, donde cumplen prisión preventiva acusadas por tentativa de homicidio de un vecino, identificado como Juan Antonio Leguizamón.

En su declaración judicial, las jóvenes ratificaron que actuaron "en defensa propia", porque el hombre, afirmaron, intentó violarlas cuando regresaban a su casa, en la localidad de Paso del Rey.

Según algunos testimonios surgidos en la causa, al momento del hecho el hombre llevaba un arma que, presuntamente, disparó contra las jóvenes; sin embargo, el revólver no apareció en la escena del crimen.

Naddeo destacó en un informe que, según la palabra de algunas personas, "el acosador de las chicas es un tipo conocido en la zona por sus contactos con la policía local y tendría varias causas penales en su haber".

"Conjeturamos que sus vínculos con la fuerzas de seguridad, le habrían permitido construir una historia que rápidamente se instaló en sede judicial, convirtiéndose de agresor en víctima de un supuesto intento de homicidio", señaló la legisladora.