El FBI clausuró el más importante archivo y banco de intercambio de datos digital del mundo, Megaupload, cuyos directivos fueron detenidos bajo la acusación de “fomentar la piratería” y pueden ser condenados a cincuenta años de prisión.

El cierre del sitio provocó una masiva e inmediata reacción del grupo de piratas informáticos Anonymous, que hackearon páginas web de importantes organismos de seguridad estadounidenses, de discográficas y de asociaciones de registros de autor.

Un tribunal de Nueva Zelanda decretó prisión preventiva para el fundador del portal de descargas, Kim Schmitz, reclamado por Estados Unidos donde ha sido acusado de ‘piratería’ informática y lavado de dinero.

Según el inspector Grant Wormald, el creador de Megaupload trató de refugiarse en una caja fuerte cuando llegó la policía. “El señor 'Dotcom' entró en su casa y trató de encerrarse activando una varios mecanismos electrónicos. Una vez neutralizados los códigos por la policía, se parapetó dentro de una habitación acorazada”, señaló. Una vez que los agentes llegaron a él, encontraron “cerca” un arma que parecía una escopeta de caza.

También fueron ingresados a prisión preventiva los directivos también alemanes Finn Batato y Mathias Ortmann, así como el holandés, Bram van der Kolk. Además de las cuatro detenciones en Nueva Zelanda, se han realizado redadas en Estados Unidos y otros nueve países, entre ellos Holanda y Canadá.