El padre Julio César Grassi, condenado a 15 años de prisión por abuso sexual y a quien la Cámara de Casación Bonaerense le confirmó la detención por haber violado las reglas de libertad vigilada, ya hizo la reserva ante este tribunal para apelar en los próximos días y así evitar una inminente detención en su contra.

Los abogados que patrocinan al sacerdote ya hicieron reserva de interponer recurso de inaplicabilidad de la ley, esto es de recurrir ante la Suprema Corte Bonaerense, para lo cual tiene un plazo de 20 días corridos.

De esta forma, Grassi inició el trámite con el cual intenta evitar una inminente detención confirmada por la Casación este jueves a raíz de que el religioso violó las reglas de conducta por su libertad vigilada, al referirse en público de las víctimas del abuso sexual por el cual se lo acusa.