Dos horas habían pasado desde su nacimiento. El bebé había salido al mundo con sólo 580 gramos y los médicos le habían dicho a su familia que estaba muerto. Sin embargo, una tía insistió con verlo y notó que se movía. Sus padres, muy creyentes, lo llamaron Jesús.

La escena ocurrió en las primeras horas de ayer y tuvo lugar en el Hospital Provincial Enrique F. Erill, de Escobar. Allí, Lucas Pomes, de 18 años, y Ayelén Alegre, de 22, habían acudido días atrás gracias a los fuertes dolores.

Los médicos el habían dicho a Ayelén que su hijo había muerto en el vientre. Durante la madrugada de ayer le realizaron una cesárea y dejaron a la criatura sobre una mesada del área de neonatología, sin ninguna atención, durante al menos dos horas.

"Quiero que los médicos expliquen realmente cómo fue el tema", exigió Marta Pomer, otra de las tías de la criatura, a quien bautizaron Jesús. La mujer contó que el domingo a la madrugada "el nene nació muerto, estuvo dos horas y esperaron ese tiempo para entregarlo a los familiares porque supuestamente estaba muerto". Según los médicos, ahora hay que esperar 48 horas para ver cómo evoluciona la salud del pequeño.

"Cuando mi hermana Marisa pide ver al sobrino, dice que empezó a mover las manitos, que abrió los ojos y empezó a llorar", relató. En declaraciones al canal Todo Noticias (TN), Pomer manifestó que "los médicos se quedaron sorprendidos porque supuestamente estaba muerto".

Pomer sostuvo que "fue un milagro", aunque agregó: "Quiero que los médicos expliquen realmente cómo fue el tema". "Durante el trayecto del embarazo a mi hermana le hicieron un daño psicológico, les venían diciendo: 'Tenga paciencia porque el bebé no está formado, no tiene bracitos'... todo lo más feo que se puede esperar de un embarazo se lo dijeron", se quejó.

Por su parte, el director del hospital, Carlos Ramos, negó la versión de la familia y aseguró que se trata de un invento de la familia. Según el hombre, los familiares de Jesús supo desde un principio que el bebé había nacido con "pocas chances de sobrevivir", pero que "de ninguna manera" se les dijo que estaba muerto.

Ramos negó también que la tía haya ingresado al área de neonatología. "Tenemos personal de vigilancia y ninguna persona puede entrar allí. Menos a las dos de la mañana", aclaró, y aseguró que la mamá de la criatura "está ajena a todo esto".

"Yo le pedí a la mamá que hable con la prensa para dar su versión, pero me dijo que no quiere exposición", señaló Ramos, y agregó: "Cuando uno habla con la mamá y ve la historia clínica no coinciden las versiones".