Un policía que cumplía funciones de chofer y seguridad se disparó con el arma reglamentaria en la cabeza luego de dejar en la gobernación a Francisco Pérez. Tras permanecer en estado de coma profundo por haberse disparado en la cabeza, el policía Jorge Villagra falleció esta madrugada en el Hospital Central de Mendoza.

El dramático episodio protagonizado por el custodio del gobernador Francisco “Paco” Pérez generó una conmoción en la zona de la sede gubernamental, donde los propios compañeros del herido se movilizaron para trasladarlo al Hospital Central, en el mismo vehículo -un Peugeot 408 gris- en el que se desató la tragedia.

Ayer, desde el hospital informaban que el asistente del gobernador de Mendoza sufrió pérdida de masa encefálica por una herida de arma de fuego en el cráneo. El gobernador Pérez y varios miembros de su gabinete se trasladaron al hospital Central donde siguieron de cerca la evolución del custodio.

La primera hipótesis sobre los motivos que llevaron al custodio a tomar la decisión de quitarse la vida apuntó a un problema con su esposa. Y la especulación tomó fuerza por el mensaje que Villagra escribió en su muro de Facebook. El policía habría discutido con un familiar por teléfono y tras escribir una serie de cartas y despedirse de su familia en la red social se disparó en la sien con la misma arma reglamentaria.

El ministro Aranda, el único funcionario autorizado para informar sobre lo que sucedió, detalló que Villagra había llevado al Gobernador a un acto y a las 17:20 lo dejó en la explanada de la Casa de Gobierno. Cuando le comunicaron que ya había concluido su jornada laboral, el custodio corrió el auto hacia uno de los costados del edificio para “limpiarlo”, según les comentó a sus compañeros.

Minutos después, uno de los empleados de la gobernación se acercó al automóvil y encontró a Villagra malherido, tirado sobre el lado del acompañante.