Una nena argentina de 10 años de edad fue encontrada por la policía brasileña siete años después de haber sido raptada por su padre, quien la mantenía prácticamente secuestrada.

El hallazgo de la menor se produjo en marzo pasado en la ciudad de Dourados, estado de Mato Grosso do Sul (occidente), pero sólo trascendió a la prensa este sábado después de que las autoridades, tras comprobar la identidad de la nena, se la entregaron a representantes de la embajada argentina.

La Policía Civil de Mato Grosso do Sul, estado fronterizo con Bolivia y Paraguay, dijo que encontró a la nena gracias a un denunciante anónimo que informó de maltratos a la menor y que su padre la mantenía en una "cárcel privada".

La pequeña, que pasó los dos últimos meses en un albergue infantil en Dourados, viajó este sábado con representantes de la embajada argentina, que se la entregarán a su madre, de origen boliviano.

La diplomática argentina María Seane de Chiodi indicó a periodistas en Dourados que durante su estancia en el albergue la chica recibió asistencia médica, psicológica y lingüística por parte de la embajada.

Tras el hallazgo, el padre de la menor, de nacionalidad paraguaya, estuvo detenido durante varios días pero escapó del país con una identidad falsa después de que la justicia le dio el beneficio de una detención domiciliaria.

Una prueba de identificación genética comprobó que la menor es la misma que fue raptada en 2005 por su padre en Argentina y que las autoridades argentinas buscaban en Paraguay, país de origen del acusado.

El juez de la Infancia y la juventud de Dourados, Zaloar Murat Martins, indicó que el hombre impedía que la menor fuese a la escuela y saliese a las calles por temor a ser reconocidos. "Descubrimos que la nena había vivido con el padre en Paraguay, en (la ciudad de) Pedro Juan Caballero", relató el juez.