¿El temor al delito es real o estimulado por el entorno? Tras varias encuestas que colocan a la inseguridad como la principal preocupación de la sociedad, el fiscal de la Plata, Marcelo Romero, ratificó las estadísticas y dijo que “aumentó la cantidad de delitos”.

“Además –señaló- aumentó la violencia y esto no es una ‘sensación’ o un invento de los medios. Nosotros miramos nuestro ombligo, no sabemos discutir y no encontramos mínimos factores comunes para elaborar políticas criminales, serias y duraderas. Ahora estamos en un abolicionismo progre, en el que no se llama a las cosas por su nombre: al delincuente se lo llama ‘pibe excluido’, a la cárcel se la llama ‘establecimiento’; queremos quedar bien con Dios y con el Diablo y engañarlos a ambos”.

En ese sentido, agregó que “no reconocemos un problema. El primer paso para encontrarle una solución a una dificultad es aceptarla como tal; nosotros la negamos”.

Para Romero, “es muy fácil echarle la culpa a las leyes, a la policía, a los gobernadores, a la presidenta. Creo que todos debemos hacer una profunda autocrítica. Vivimos en una burbuja ideológica, creyendo que estamos en Holanda, Alemania o Italia, repitiendo teorías procesales que son muy buenas para esos países pero nos olvidamos que estamos en el Río de La Plata”.

Sumado al reconocimiento del problema, el fiscal platense advirtió sobre la necesidad de “establecer una política criminal seria y duradera con tres o cuatro puntos comunes para cualquier gobierno. También ya que admitir que estamos fracasando con el narcotráfico, parece que desapareció después del fallo que avaló la tenencia de estupefacientes para uso personal”.

En otro orden, remarcó que “la prevención no es poner cámaras en las calles o patrulleros”. Si bien reconoció que esto es necesario para la investigación, afirmó que “hay que llegar antes”.

Sobre el caso Carolina Píparo, admitió que están “en un conflicto porque no sabemos dónde está la señora”.