Samsung y LG coincidieron ayer por la noche al presentar sendos relojes inteligentes en su país, con la promesa de ofrecerlos en todo el mundo entre octubre y diciembre.

Se adelantan, así, al Moto 360, que la semana próxima tendrá una presentación oficial; se sabe casi todo de él, salvo el precio, la fecha de venta y algunos datos menores.

Las compañías surcoreanas no están solas: en el marco de la feria IFA (que se hará del 5 al 10 de septiembre en Berlín), se espera que Sony renueve su línea de relojes y Asus presente oficialmente su smartwatch, el Zenwatch (ver más abajo). Apple, además, entraría en el segmento de la informática de vestir con un dispositivo que presentaría el 9 de septiembre, aunque no se sabe si será un reloj inteligente de formato convencional, una pulsera deportiva tipo Fitbit/Fuelband u otro formato.

El Gear S es el sexto reloj inteligente de la compañía, y combina dos diseños anteriores al ofrecer una pantalla de Supler AMOLED, cuadrada como la del Gear 2 pero curva como la del Galaxy Fit, para ofrecer un formato que, en teoría, se amolda mejor a la muñeca del usuario.

El resto de las especificaciones y funciones son las tradicionales, al mostrar las notificaciones que llegan al teléfono en la pantalla del reloj, pero sumando una conexión 3G y Wi-Fi independiente y un GPS propio; así, el reloj puede recibir mensajes, e-mail y demás sin depender de un smartphone, lo mismo que mostrar mapas (de Nokia HERE) en la pantalla táctil de 2 pulgadas. Incluso tiene un teclado en pantalla para responder mensajes, y se pueden hacer llamadas; es, en definitiva, un teléfono de pulsera: tiene un chip de doble núcleo, 512 MB de RAM, 4 GB internos, monitor cardíaco y es resistente al agua y al polvo. Según Samsung la batería de 300 mAh le da 2 días de autonomía.

Un dato oscuro pero interesante es que este dispositivo usa Tizen, una distribución de Linux sobre la que Samsung ha puesto mucho esfuerzo, y evita el uso de Android Wear (que sí tiene su reloj Gear Live), la plataforma de Google para este tipo de dispositivos.

Junto con este reloj-teléfono (similar en funciones al Timex Ironman One GPS+ presentado hace unas semanas) la compañía presentó una suerte de collar que funciona como manos libres Bluetooth.

LG ya había adelantado en un video que planeaba ofrece un reloj con pantalla circular al estilo del Moto 360, y cumplió: el G Watch R ofrece precisamente eso, con Android Wear y un aspecto muy clásico.

Este reloj tiene una pantalla de OLED plástico (P-OLED, como el G Flex) de 1,3 pulgadas, que según la compañía tiene buena visibilidad al sol -un punto flaco de su hermano, el G Watch-, un chip Qualcomm Snapdragon 400, 512 MB de RAM, 4 GB internos y una batería de 410 mAh, además de ser resistente al agua y al polvo. Tiene un sensor de ritmo cardíaco y un cuerpo de acero, además de aceptar mallas estándar de 22 mm.