Funcionarios de la Argentina y Brasil suscribieron este miércoles el acuerdo destinado a reanimar la alicaída industria automotriz.
  
En el encuentro, que se realizó en el Salón Scalabrini Ortiz del Palacio de Hacienda, participaron el ministro de Economía, Axel Kicillof, su par de Industria, Débora Giorgi, y el embajador argentino en Brasil, Luis María Kreckler.
  
Por Brasil asistió el ministro de Producción, Mauro Borges, junto a otros funcionarios de ese país.
 
Tras la rúbrica, Kicillof aseguró que la prórroga al régimen existente para la industria automotriz “da certidumbre y señales claras sobre qué significa el sector para las políticas públicas y se abre a partir de hoy una nueva etapa de profundización en la relación bilateral de la industria automotriz con Brasil”.
 
El funcionario agregó que se busca que “el proceso de integración avance en cuanto al contenido tecnológico y a la participación de productores nacionales” y estimó que la medida significará “una palanca para que el sector pueda seguir creciendo como en los últimos años”.
 
Por su parte, la ministra de Industria, Débora Giorgi, afirmó que las negociaciones encaradas con el vecino país en el sector automotriz tuvieron como eje central la idea de potenciar una “integración productiva”, y dijo que la hoja de ruta trazada apunta a alcanzar un nuevo acuerdo que entrará en vigencia el 1 de julio de 2015 y se extenderá hasta el 2020.
 
Giorgio dijo que estas negociaciones se llevaron a cabo en momentos en los que vence el acuerdo vigente, los mercados de ambos países muestran una desaceleración en el comercio y las dos naciones tienen un importante volumen de compra de manufactura automotriz con terceros países.