Volodymyr Zelenski, el presidente de Ucrania que pide a gritos que Occidente lo ayude a resistir la invasión rusa, solo recibirá algunos pertrechos, aunque no una zona de exclusión aérea sobre su territorio ni tropas de combate, mientras que la OTAN ha decidido reforzar sus fronteras con ese país, para disuadir a Vladimir Putin de no invadir algún otro país.

En una declaración conjunta después de una reunión en Bruselas, la OTAN manifestó: "En respuesta a las acciones de Rusia, activamos los planes de defensa de la OTAN, desplegamos elementos de la Fuerza de Respuesta de la OTAN y colocamos 40.000 soldados en nuestro flanco oriental, junto con importantes activos aéreos y navales, bajo el mando directo de la OTAN con el apoyo de los despliegues nacionales de los aliados".

Según la alianza militar, las acciones de la OTAN siguen siendo "preventivas, proporcionadas y no escaladas" en preparación para "una realidad estratégica más peligrosa".

El comunicado dice también que "fortaleceremos significativamente nuestra postura de disuasión y defensa a largo plazo, y desarrollaremos aún más la gama completa de fuerzas listas y capacidades necesarias para mantener una disuasión y una defensa creíbles".

Estos pasos estarán respaldados por ejercicios mejorados con un mayor enfoque en la defensa colectiva y la interoperabilidad. La alianza también mejorará su preparación para amenazas químicas, biológicas, radiológicas y nucleares, según el comunicado, y se discutirán más decisiones en Madrid.