El precandidato republicano Rick Santorum ganó anoche unas peleadas elecciones primarias en los estados sureños y conservadores de Alabama y Mississippi, poniendo en cuestión el sitial de candidato de Mitt Romney.

En una gran noche para Santorum, el ex senador de Pensilvania logró la victoria en el estado de Alabama con el 35% de los votos, dejando segundo al ex presidente de la cámara Baja Newt Gingrich con el 29%, según datos de las cadenas de noticias estadounidenses escrutada casi la totalidad de los sufragios.

Prácticamente empatado con Gingrich aunque tercero por escasos votos quedó el favorito a nivel nacional, el ex gobernador de Massachusetts Mitt Romney.

A su vez, Santorum ganó con una estrecha pero suficiente ventaja en Mississippi, donde con el 33% de los votos dejó a dos puntos de distancia a Gingrich y a tres a Romney. “Lo hicimos de vuelta”, afirmó el ex senador desde su “bunker” en Louisiana tras haber sido declarado ganador en Alabama.
Antes de partir en las próximas horas hacia Puerto Rico para continuar su campaña, Santorum aseguró que seguirá compitiendo “en todas partes” y que finalmente será él quien logrará la nominación como candidato del partido republicano antes de la Convención Nacional de Tampa, Florida, a finales de agosto. 

En tanto, a pesar del incremento de eventos y apariciones a último momento que le permitió pelear de cerca las primarias en Alabama y Mississippi, el ex gobernador de Massachusetts Mitt Romney no logró superar el tercer puesto en ninguna de las dos elecciones primarias. Sin embargo, lo más importante para Romney continúa siendo mantener su ventaja para obtener los 1.144 delegados requeridos para ser nominado.

En este sentido, tras los resultados de Alabama y Mississippí, Romney lograba el número de 480 delegados, Santorum lo seguía con un alejado 234, mientras que Gingrich obtenía 139 y el legislador texano Ron Paul – quien no llegó a los dos dígitos en votos en ninguno de los dos estados – se mantenía en 66.