Manifestantes prorrusos atrincherados en la sede del Gobierno de la región ucraniana de Donetsk, proclamaron la independencia de esa zona rusoparlante y convocaron la celebración de un referendo de adhesión a Rusia para el próximo 11 de mayo.

Tras anunciar la creación de la llamada República Popular de Donetsk, en los límites de esa región fronteriza con Rusia, los manifestantes solicitaron ayuda a Moscú "para resistir ante la junta de Kiev".

La movida de Donetsk calca lo sucedido el pasado 27 de febrero con Crimea, de población también mayoritariamente rusoparlante, cuando su Parlamento convocó a un referendo que derivó en la separación de Ucrania y la posterior anexión a Rusia.